Vidas rotas

por | Sep 28, 2020 | Narraciones Cortas | 0 Comentarios

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con  la derecha cogió con fuerza la mano protectora de su madre. ¡Verás – dijo la madre— cómo nos lo pasaremos de  bien en el parque!

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con la derecha cogió con fuerza la mano protectora de su madre. ¡Verás – dijo la madre— cómo nos lo pasaremos de bien caminando por este lugar!

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con la derecha cogió con fuerza la mano protectora de su madre. ¡Verás – dijo la madre— cómo nos lo pasaremos de bien en esa balsa!

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con la derecha cogió con fuerza la mano protectora de su madre. ¡Verás – dijo la madre— cómo nos lo pasaremos de bien en ese barco!

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con la derecha cogió con fuerza la mano protectora de su madre. ¡Verás – dijo la madre— cómo nos lo pasaremos de bien en este campamento!

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con la derecha cogió con fuerza la mano protectora de su madre. ¡Verás – dijo la madre— cómo nos lo pasaremos de bien en el campo de refugiados!

 

Abrazó a su oso de peluche con la mano izquierda y con la derecha cogió con fuerza un trozo de madera. ¡Verás lo bien que lo pasarás conmigo! Dijo el hombre que la violó.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos en la casa de acogida.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos al salir del juicio.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos fuera de la comisaría.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos en este hospital.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos en casa de la abuela.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos cuando deje de pegarte.

 

Cogía la mano derecha de su madre, que con la izquierda abrazaba el oso de peluche. Verás mamá –dijo—lo bien que nos lo pasaremos cuando deje de violarte.

 

 

 

Enviar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Pin It on Pinterest

Share This
¿Te Puedo Ayudar?